Abrí el buzón y allí estaba. Era una carta de la Fundación UNED, en su interior información sobre tres cursos. Escribo de memoria así que recuerdo que uno estaba relacionado con la sexualidad, un segundo con la risa, y el tercero, del que me había olvidado, con la relajación y el control emocional.
-Interesante, pensé. ¿Será que se palpa el malestar en esas tres cuestiones en el ciudadano de a pie? ¿Será que en tiempos de crisis se disparan este tipo de problemas? ¿Será que resultan más atrayentes a la hora de venderse, precisamente por la crisis?
Ahora, con la información ante mí, leo que no se requiere titulación previa, van destinados a cualquier persona interesada y el precio de cada curso son 350 euros, pero si te matriculas de 2 te dan una beca de 100 euros y si te animas a los tres la beca asciende a 250 euros. Están en oferta. Todos a distancia salvo alguna sesión presencial.
Claro que por mucha oferta que hagan, la crisis es la crisis y habrá que elegir. En mi caso creo que dejaría en tercer lugar el que había olvidado, el relacionado con la relajación y el control emocional, ¿pues la risa y el sexo no relajan?
Lo anterior me ha traído a la mente aquella ocasión en que me matriculé en un curso de oratoria, a distancia. La voz es mi herramienta de trabajo y desde hace unos años no hay invierno que pase sin que la pierda por completo. Me animó el hecho de que la parte teórica incluía, entre otras cosas, estrategias para proyectar la voz sin forzarla. La parte práctica consistía en grabaciones que se enviaban al profesor tutor para su valoración.
Una de las prácticas consistía en comparar la claridad y mejora que se producía en la lectura de un texto antes y después de realizar determinado ejercicio. Éste consistía en la lectura de un párrafo al azar como línea base; posteriormente se introducía en la boca determinado peso –creo recordar que eran un par de bolas- y se leía de nuevo el párrafo con ellas dentro (yo sustituí las bolas por unas monedas que envolví en un plástico fino). Esta parte no había que grabarla, afortunadamente. Cuando, finalmente, sin peso en la boca, se procedía a una tercera lectura se observaba mayor claridad en la pronunciación porque el efecto del esfuerzo previo se había traducido en una mayor vocalización.
Advierto que es conveniente esconderse cuando se procede a la lectura con bolas o monedas, o como mínimo avisar. Explicaciones aclaratorias como que se trata de un curso ante preguntas simples como ¿qué haces? y similares puede que no sean ni medio comprendidas, aunque se hayan pronunciado y vocalizado correctamente sin las bolas en la boca.
La advertencia la haré también en inglés para los alumnos aventajados y los que traen cuaderno:
I must say that you´d better hide yourself when reading with the balls or coins inside your mouth or, at least, warn the people around. Explanations trying to make it clear that you are taking a course when you are asked simple questions like “what are you doing? may not be easily understood even when they are pronounced and vocalized correctly without using the balls/coins.
Más información sobre los cursos se puede encontrar en:
Sexualidad positiva: www.sexualidadpositiva.org/asmo
La risa y el humor para prevenir el estrés: www.jajajaja.es
Relajación y control emocional: Biofeedback. www.ansioteps.com
(Que conste que no me pagan por promocionarles ni ninguna historia rara de esas)
-Interesante, pensé. ¿Será que se palpa el malestar en esas tres cuestiones en el ciudadano de a pie? ¿Será que en tiempos de crisis se disparan este tipo de problemas? ¿Será que resultan más atrayentes a la hora de venderse, precisamente por la crisis?
Ahora, con la información ante mí, leo que no se requiere titulación previa, van destinados a cualquier persona interesada y el precio de cada curso son 350 euros, pero si te matriculas de 2 te dan una beca de 100 euros y si te animas a los tres la beca asciende a 250 euros. Están en oferta. Todos a distancia salvo alguna sesión presencial.
Claro que por mucha oferta que hagan, la crisis es la crisis y habrá que elegir. En mi caso creo que dejaría en tercer lugar el que había olvidado, el relacionado con la relajación y el control emocional, ¿pues la risa y el sexo no relajan?
Lo anterior me ha traído a la mente aquella ocasión en que me matriculé en un curso de oratoria, a distancia. La voz es mi herramienta de trabajo y desde hace unos años no hay invierno que pase sin que la pierda por completo. Me animó el hecho de que la parte teórica incluía, entre otras cosas, estrategias para proyectar la voz sin forzarla. La parte práctica consistía en grabaciones que se enviaban al profesor tutor para su valoración.
Una de las prácticas consistía en comparar la claridad y mejora que se producía en la lectura de un texto antes y después de realizar determinado ejercicio. Éste consistía en la lectura de un párrafo al azar como línea base; posteriormente se introducía en la boca determinado peso –creo recordar que eran un par de bolas- y se leía de nuevo el párrafo con ellas dentro (yo sustituí las bolas por unas monedas que envolví en un plástico fino). Esta parte no había que grabarla, afortunadamente. Cuando, finalmente, sin peso en la boca, se procedía a una tercera lectura se observaba mayor claridad en la pronunciación porque el efecto del esfuerzo previo se había traducido en una mayor vocalización.
Advierto que es conveniente esconderse cuando se procede a la lectura con bolas o monedas, o como mínimo avisar. Explicaciones aclaratorias como que se trata de un curso ante preguntas simples como ¿qué haces? y similares puede que no sean ni medio comprendidas, aunque se hayan pronunciado y vocalizado correctamente sin las bolas en la boca.
La advertencia la haré también en inglés para los alumnos aventajados y los que traen cuaderno:
I must say that you´d better hide yourself when reading with the balls or coins inside your mouth or, at least, warn the people around. Explanations trying to make it clear that you are taking a course when you are asked simple questions like “what are you doing? may not be easily understood even when they are pronounced and vocalized correctly without using the balls/coins.
Más información sobre los cursos se puede encontrar en:
Sexualidad positiva: www.sexualidadpositiva.org/asmo
La risa y el humor para prevenir el estrés: www.jajajaja.es
Relajación y control emocional: Biofeedback. www.ansioteps.com
(Que conste que no me pagan por promocionarles ni ninguna historia rara de esas)
Gracias por la información, Angie, me acabo de apuntar. Por ese precio dos sesiones presenciales no está na mal. Y además con diploma que dan y apuntes por si te olvidas de algo. Está muy bien.
ResponderEliminarVoy a cursar el biofeedback.
Por cierto, hoy no he traido el cuaderno.
Me parecen muy interesantes los tres cursos, pero me falta información sobre si incluyen o no las prácticas.
ResponderEliminarIré a las direcciones que nos recomiendas, pero si sabes algo, nos lo dices.
Besitos
Muy interesante, Angie.
ResponderEliminarYo de apuntarme a alguno sería al de sexualidad. Creo que siempre viene bien perfeccionarse en esta disciplina y ninguna información o conocimiento al respecto sobra.
El de la risa no lo necesito. Me río cada día varias veces. Lo necesito. También lloro, aunque no a diario, claro, pero fácilmente. También por necesidad...
Lo de la relajación sería inútil para mí. Soy incapaz. Cuando lo he intentado, o no paro de moverme o me duermo. No tengo término medio...
Un beso y gracias :D
No sé por cuál decantarme de los tres, pues me parecen a cada cual más interesante y útil.
ResponderEliminarNo cabe duda que nos viene muy bien a todos tener mejor sexo, que a la vez relaja y que en muchas ocasiones nos hace reir.
Besitos, Angie.
Yo creo que con el de sexualidad positiva, podríamos ahorrarnos los otros dos porque relajación y buen humor vendrán por añadidura si le sacamos provecho a aquél.
ResponderEliminarPienso que la matriculación de a dos es la más conveniente en este caso...un tercero puede distraer el aprendizaje ¿no?.
Bueno, lo del look es probar a ver si es cierto que "renovarse es vivir"
Besitos
Como anticursillista feroz discrepo de las necedades que se puedan aprender en cursos de cualquier pelaje, sometidos como estamos al único curso que si requiere nuestros esfuerzos y afanes: el puñetero y premioso curso de la vida.
ResponderEliminarMr. Vitamorte, no sé qué voy a hacer con usted: se trae el cuaderno cuando no estoy y cuando estoy no se lo trae. Pues ya me dirá qué hacemos. Menos mal que cuando quiere tiene buena cabeza. ¿Ha hecho los deberes de las bolas? De eso no me dice nadie nada.
ResponderEliminarLuis Antonio, podemos proponer que las prácticas sean en parejas o de tres en tres, ¿De qué curso?
ResponderEliminarHe probado lo de las bolitas,sí.
ResponderEliminarPero tenías que haber advertido que no tenían por qué ser de billar.
¿Cómo las saco yo ahora?
Pues yo hoy no sé lo que necesito, Novicia,para mí es una incógnita, una X, y despejar las X siempre se me ha dado mal porque soy de letras. Yo también lloro y río, si eso te consuela, acuerdo contigo que son de obligación y también relajan, pero llorar cada vez me gusta menos, me pongo muy muy fea. Vámonos de curso, te dejo que elijas.
ResponderEliminarCristal, yo también creo que con el de sexualidad matamos tres pájaros de un tiro. Las mujeres vamos todas en la misma línea, pero ya ves los hombres: que si me puedes dar más información, que si yo el de "feedback", que si yo soy anticursillista... no se apunta ni uno.
Sabía que eras de las mías, Mara, yo creo que no nos interesa meternos en mucho curso junto porque tenemos también el tema de la cocina entre manos y ahora, además, que tenemos un hombre que nos guisa... Oye, estoy pensando que igual se apuntaba con nosotras al curso...
Por cierto, ahora que digo de cocina, el otro día una amiga fue a una reunión de tappersex y me estuvo contando, se lo pasó de miedo. Le pregunté que si había sido en su casa y me dijo que no, que en una sala de una cafetería y que el camarero allí les subía los cafés con bollería y se los colocaba donde podía al lado de los artilugios que había desperdigados por toda la mesa. Ya le dije: la próxima avisa, guapa, pero asegúrate que es tappersex y no tapperware, que me voy a dar cuenta rápido.
Es que el curso de la vida es mucho más duro, Krapp, ya sé que eres anticursillista pero ¿no te animas a venirte con nosotras?
No worries, Vitamorte, que las bolas de billar para escribir no te afecta, yo te encuentro igual. Claro, es que eran de las de jugar a las chapas, pero ya verás cuando consigas sacártelas lo bien que vas a pronunciar, te lo digo yo.
Las chapas y las bolas eran juegos diferentes, verdad?
ResponderEliminarYa me contesto yo a lo de las bolas, que los hombres que pasan por aquí no han debido jugar nunca ni a las bolas ni a las chapas, solo hay que ver las bolas que ha entendido Vitamorte.
ResponderEliminarSí Angie, las bolas y las chapas son juegos diferentes.
Ahora ya paso página.